El sol es un gran disparador de vitamina D, pues la piel, al hacer contacto con su luz, genera esta vitamina. Esta vitamina es útil para el fortalecimiento de los huesos y mantenerlos sanos. Sin embargo, no podemos permanecer mucho tiempo tomando el sol, ya que demasiada exposición, nos haría enfermar.

Es por esto que te damos algunas recomendaciones para disfrutar del sol en Cancún o en el sitio donde te encuentres, sin sufrir en el intento.

1. Hidratación

La mejor manera de hidratarte siempre será con agua purificada. Los refrescos y aguas saborizadas te harán sentir bien al momento de tomarlas, pero te producirán más sed debido al azúcar contenida en ellas. Si ya te expusiste de más al sol, un suero te vendría bien. Los más recomendables son los sueros en polvo, ya que evitan la deshidratación y son muy útiles en casos de diarrea. Estos sueros contienen una mezcla de elementos, como sales y minerales, que permiten al cuerpo reponer los líquidos perdidos.

2. Protección UV

Hoy día, hay una gran variedad de bloqueadores solares, incluso, amigables con el medio ambiente. Compara especificaciones de tus opciones y elige el mejor. Si ya sabes tu factor de protección solar (SPF), elige el que vaya acorde a tu piel o pide una sugerencia a tu farmacéutico de la mejor opción para ti.

Otro complemento de protección UV son las telas tecnológicas que se usan para confeccionar trajes de baño, entre otras prendas, para protegerse del sol, que tienen un filtro, evitando el daño en las células de tu piel. Opta por camisetas de manga larga y pantalones largos. No olvides proteger tu cabeza también con algún gorro o sombrero y tus ojos, con gafas de sol, también con factor UV 400 (de preferencia). Para este tipo de prendas es recomendable un factor de protección ultravioleta 50, UPF 50, para bloquear la radiación ultravioleta A (UVA) y la radiación ultravioleta B (UVB). Pregunta por ellas en tiendas especializadas de deportes o en tiendas con trajes de baño en venta, para uso deportivo.

3. Tiempo

Dale tiempo a tu cuerpo de descansar un poco del sol y recuperarse. Si se trata de tiempo recreativo, puedes elegir muchas otras actividades que no requieren una exposición directa al sol. Si te encuentras en la playa, puedes disfrutar tu tiempo al amanecer o en la puesta de sol . Permanecer al sol por más tiempo del debido, puede generar agotamiento e irritabilidad. Si tienes niños pequeños y están de mal humor, tal vez no se trate de un berrinche, sino de calor.

4. Frescura

En lugares como la Riviera Maya y Cancún, por ejemplo, es importante contar con algún aire acondicionado dentro de la casa-habitación. En caso de no tener un aire acondicionado, un ventilador puede funcionar, siempre y cuando no se trate de un caso de calor extremo – más de 32 grados centígrados – puesto que no enfriará el aire, solo lo revolverá, lo cual puede generarle más calor al cuerpo. También puedes optar por humedecer un poco las sábanas que estás utilizando en tu habitación o incluso humedecer un poco tu ropa y propiciar la convivencia en interiores o con sombra o zonas techadas, en exteriores.

5. Refréscate

Si te mantuviste un buen rato ejercitándote o trabajando en el sol, una vez que te hidrates, refresca tu cuerpo tomando un buen baño con agua templada para evitar algún choque de temperatura o si tienes alguna piscina cerca, úsala con las debidas protecciones antes mencionadas. No olvides mojar tu cabeza para refrescarla y no exponerte demasiado al sol. El tiempo de exposición depende de cada persona y tipo de piel; puede ir de 10 hasta 45 minutos.

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Fuente:

https://www.healthychildren.org/Spanish/safety-prevention/at-home/Paginas/protecting-children-from-extreme-heat-information-for-parents.aspx